"Le Chansons D'Amour" de Cristophe Honoré, inédita en salas españolas, contagió sus buenas vibraciones y sus pegadizas, intensas y reveladoras canciones. Homenaje impúdico a la Nouvelle Vague y los musicales de Jacques Demy, consiguió contra todo pronóstico el Premio a la Mejor Película del año. También los de Mejor Banda Sonora y Mejor Canción.